Que la forma de la tierra sea lacayo
En la vista del entierro y traiga el celo
Y el abrigo. Que atragante la infatiga.
Que decida por el frío cuánto lleva.
Que calcule cada paso, que se pierda en el olvido.
Que la falta de alimento sufra un día cada día.
Y en el tiempo de la sombra
En la noche del olvido
Que en la jungla
Que en los mares
Sepa y grite
Rumie
Sueñe.
Que la proa nunca apunte
Que la flecha nunca caiga
Que mañan sea nunca
Que se muera de vivir.
Que recuerde cada día.
Que nunca sea por mi.