Hoy podría decirte lo que me acaba de pasar con la policía nacional.
Hoy deberías haber estado conmigo hoy nos reiríamos en la cama mientras hablabamos de todo aquello y yo te acariciaba la barriga y la espalda, hoy podríamos dormirnos bebiendo su vinillo dulce o la ginebra sin limón. Hoy sabrías lo que es quererte y que el runrún del aire acondicionado nos llevase al reino de los sueños mientras tu piel calentase la mía.
Pero tu no estabas.