El enano no te merece, además parece que tenga treinta y cinco años más que tú. Patán de medio pelo... Y el teléfono, sin batería, no me conectaba a blogger porque quería hablar contigo. Aun siendo soplar al aire, lágrimas en la lluvia, aun sin valer nada estas palabras no son tan vanas como las que ya fueron. Como todas aquellas, poemas de mi ser, que dije y escribí cuando tú no estabas.
Y así, un subnormal te tendrá y no te merece. Y así me quedé frío, seco, y chumando cerveza. En el momento parecía tan grave el asunto y es tan pesado ahora de digerir.
Tu teléfono no funciona y blogger no carga con tan poca batería, me dije,y tu correo no me recibirá. ¿qué ves en la cosa esa del pantano? te iba a decir. ¿De qué te ríes? Me dijeron. Ná, acabo de ver a una que iba a clase conmigo del brazo de donkey kong versión gatu...
Te iba a parar, te iba a preguntar si eras tú. ¿eras tú? ¿eres tú? ¿eras tú aquella vez? ¿eras tú siempre?
Quizá los rizos me perdieron, no lo se.
Contesta, por favor, ¿eras tú?
